jueves, 10 de agosto de 2017

Deber o Querer

¡¡¡Muy buenas, Viajeros!!!


 Aquí vuestra capitana al timón de nuevo, con una reflexión que se ha hecho de rogar. Pero como lo prometido es deuda, aquí la tenéis.  😄







Ya sabéis que soy muy dada a reflexionar y darle muchas vueltas a las cosas y, por suerte o por desgracia, mi mejor amigo es igual. Hace ya unos cuantos días tuvimos una de esas charlas reflexivas que se dan a las tantas de la madrugada. Se preguntaba que, cuando estabas dividido entre algo que querías hacer y algo que sentías que debías hacer, qué es lo que debes hacer, como sabes qué elegir.


No es que sea ninguna experta, no soy quién para decirle a nadie lo que tiene o no tiene hacer. Pero siempre he pensado que lo único que debes hacer es aquello que te haga feliz, aquello que te dicte el corazón. Tú sabrás y decidirás si es lo correcto o no, lo que debes hacer o no, pero debes asegurarte de que es lo que quieres de verdad, lo que sientes de verdad, porque si no te arrepentirás.


Os voy a poner un par de ejemplos. Estáis a dieta estricta, y no deberíais comer dulces. Pero es el cumpleaños de alguien cercano, o el vuestro mismamente, y han comprado vuestra tarta favorita. No deberíais comerla, pero queréis hacerlo. Puede que sea gula, el hecho de querer algo que no podéis o debéis tener, o que de verdad queréis comer un trozo de tarta. El caso es que lo correcto seria que no lo comierais, ya que estáis a dieta y es algo que os tomáis en serio. Pero lo que queréis es comer un trozo, por pequeño que sea. Así que estaríais divididos entre lo que deberíais hacer y lo que queréis hacer. La pregunta sería: ¿Que os pesaría mas: los remordimientos por haberos saltado la dieta o los remordimientos por haberos quedado con las ganas? O planteada de otro modo: ¿Que os causaría más felicidad: hacer lo correcto, lo que debéis hacer, o lo que queréis hacer?


Otro ejemplo. Os ofrecen empleo en dos sitios distintos. El sitio n°1 es un sitio donde, aunque no es de vuestro agrado, vais a aprender y ganar más. El sitio n°2 es el sitio al que siempre habéis querido ir, cerca de casa o con personas a las que conocéis y apreciáis, aunque no vayas a aprender ni ganar lo mismo que en el otro lado. Uno de los dos sitios es al que deberíais ir y el otro al que queréis ir. ¿Cómo elegir? ¿Cómo decidir cuál es la elección correcta?

Sentís que debéis ir al sitio n°1 porque es lo correcto, lo que deberíais hacer, lo que todos esperan, lo mejor para vosotros y vuestro futuro. Pero sabéis que no vais a estar a gusto, porque no es el sitio al que queríais ir de verdad, porque no vais a estar 100% cómodos allí. Porque donde en realidad queréis estar es en el sitio n°2, lo que siempre habíais querido, donde vais a estar de verdad a gusto y cómodos. Puede que no sea lo mejor para vosotros, ni vuestro futuro, ni lo que todos esperan. Pero es lo que vosotros queréis y deseáis de verdad. Es lo que os hará mas felices y, en definitiva, eso es lo que importa.


Así que tenéis dos opciones: elegir lo que sentís que debéis hacer o lo que queréis hacer. Tanto una como la otra os va a crear remordimientos de conciencia, y probablemente os arrepintáis más de una vez de vuestra elección pero, ¿que es mejor? Si elegís lo que queréis vais a trabajar con más ilusión y ganas, y eso compensará cualquier duda o remordimiento. Siempre tendréis opción de mejorar, pero no de elegir aquello que os haga feliz. Mejor arrepentirse de algo que habéis elegido porque es lo que deseabais, lo que de verdad queríais en ese momento. Os lo cuestionareis, sin duda, porque, al final del día, nos lo cuestionamos todo.



Obviamente, no todas las elecciones que haréis o tendréis que hacer en la vida van a ser blanco o negro. Siempre habrá matices. Pero lo que intentaba deciros es que no os lo planteéis como una decisión entre lo que debéis o queréis hacer. Sino como lo que, en vuestra opinión, es lo correcto o lo mejor para vosotros. Y si, he dicho vosotros. Porque aunque me gusta pensar que todavía hay personas que se preocupan por el resto y piensan también en ellos, la verdad es que la mayoría no lo hace. Cada vez somos más egoístas, así que pensar en vosotros y en vuestra felicidad, porque si no lo hacéis vosotros, no lo hará nadie. Es mejor llevarse una alegre sorpresa por no esperar nada de nadie, que llevarse una terrible decepción por esperar algo de alguien.


Estoy segura de que ahí fuera todavía hay personas capaces de sorprendernos. Pero hasta entonces, piensa en ti y en lo que sientes que quieres de corazón. El resto llegará.


¡¡Esto es todo por hoy viajeros, nos veremos pronto por aquí de nuevo!!

¡¡Muchos besos desde la Aurora!!


-A-


Imágenes obtenidas de Google y propias (@the.dawn.traveler)

4 comentarios:

  1. ¡Hola! Me ha gustado tu reflexión. Yo soy mas de hacer lo que quiero (creo), es decir, en cuanto al ejemplo del trabajo, estaría claro que cogería aquel empleo en el cual siempre he querido trabajar antes que estar en un empleo donde no estoy cómoda trabajando.

    Lógicamente, en todas las decisiones que tendremos que tomar a lo largo de nuestra vida, no podremos elegir siempre lo que queremos hacer, porque habran motivos que nos lleve a hacer lo que debemos frente a lo que queremos.

    Pero en general, soy de elegir siempre aquello que me hace feliz. Y prefiero arrepentirme de hacer algo que he querido, a arrepentirme de no haber hecho algo en algun momento.

    Saludos desde 'Mi mundo de libros'

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    1. Muchísimas gracias!!! Y estoy de acuerdo contigo, no podremos elegir siempre lo que queremos, pero cuando podamos, creo que esa es la mejor opción!!
      Un saludo, nos leemos!! ;)

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  2. Woooow... qué buena reflexión. Además, me siento muy identificada. Más de una vez me ha pasado lo de debatirme entre lo correcto y lo que me hace feliz. Qué difícil es a veces elegir...

    Fantástica entrada. ¡Un abrazacoooo! :D

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    1. ¡¡Muchísimas gracias cielo!! Y que lo digas, muy difícil... ¡¡Un abrazo y un beso enorme para ti!! ;))

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