Hoy os traigo la reseña de Mi único plan, la tercera parte de la saga Las chicas Sullivan de Andrea Smith.
No os voy a engañar: la primera parte de Las chicas Sullivan, Mi plan D, me gustó mucho y me sentí algo decepcionada al ver que la pareja protagonista, Kenzi y James, en realidad no duraron mucho. En especial después de leer el final de ¡Eh, soy Les! que me dejó algo fría. Aun así, la autora ha creado otra novela fresca, divertida y llena de amor, con un toque algo más adulto que me ha gustado casi más que las anteriores, por lo que no me ha decepcionado del todo.
Kenzi es muy dulce y divertida. Por muchos años que hayan pasado desde el primer libro, sigue siendo la misma, algo más madura, pero sin perder su esencia. Es torpe, natural e ingeniosa, lista para una nueva aventura en Nueva York y para enfrentar su primer trabajo con todas las ganas del mundo. Pero, como ya sabréis si conocéis a Kenzi, si algo le puede salir mal, le saldrá fatal, por lo que, una vez más, las risas están aseguradas con esta novela.
James es justo como recordaba, aunque ese lado pícaro y bromista esta algo más suavizado por la responsabilidad de su trabajo. Pero es estar con Kenzi y volver a ser él mismo, volver a disfrutar de las pequeñas cosas. Su relación no acabo por falta de amor, y eso se nota desde el primer momento en el que se ven, aunque a ambos les cueste reconocerlo. Hay cierta evolución en ambos que ha sido muy bonito contemplar, ver como ambos sacan lo mejor del otro, como maduran un poquito más juntos y vuelven a disfrutar de la vida en lugar de seguir encerrados en sí mismos. He disfrutado mucho de su historia y de ese final perfecto que ambos se merecían y por fin han tenido. Ay, creo que es la novela que mas he disfrutado de la trilogía de Las chicas Sullivan.
Respecto a los personajes secundarios, especial mención a Mel y Jack, que son adorables, y a Mara y Seo, que son de lo más divertidas. Me hubiese gustado poder disfrutar algo mas de Les y saber cómo está su relación con Hunter, pero aún queda Eres real, no perdamos la esperanza.
La pluma de la autora me ha atrapado de nuevo. Tiene una forma de escribir tan cercana que te engancha y hace que sea una lectura ligera y amena. Es inevitable devorar el libro, ya sea por los personajes, la historia o la forma en la que está escrito. Y como he dicho antes, he disfrutado esta historia mucho. Porque no he podido evitar que me atrapara tanto la pluma de su autora como la historia, y es que Kenzi me fascinó desde el primer momento y James me ha conquistado sin remedio. Sin duda una novela juvenil romántica, refrescante y adictiva, fácil de leer y muy divertida. Os la recomiendo sin duda, en especial si disfrutasteis de las historias anteriores.
Encuadernación: Tapa blanda
Tipo de libro: Novela juvenil romántica
Sinopsis: "Si hay algo que desespera a Kenzie Sullivan es no saber qué le deparará el futuro. Ha terminado los estudios y no sabe cómo encauzar su vida. Justo cuando cree que ya no puede sentirse más perdida, recibe una llamada de su amiga Mel que le dará un poco de esperanza.
Un trabajo en Nueva York, un nuevo comienzo. ¿O quizá no? Si meter la pata el primer día no era suficiente, cuando su nuevo jefe la convoca a su despacho para hablar con ella, descubre que éste no es otro que James Smith, su exnovio del instituto.
La situación no podría empeorar. ¿O sí? ¿Y si descubrieras que sigues enamorada de él?
Tras cuatro años separados, Kenzie y James se reencuentran e intentan retomar su amistad y, quién sabe, quizás también algo más."
Un trabajo en Nueva York, un nuevo comienzo. ¿O quizá no? Si meter la pata el primer día no era suficiente, cuando su nuevo jefe la convoca a su despacho para hablar con ella, descubre que éste no es otro que James Smith, su exnovio del instituto.
La situación no podría empeorar. ¿O sí? ¿Y si descubrieras que sigues enamorada de él?
Tras cuatro años separados, Kenzie y James se reencuentran e intentan retomar su amistad y, quién sabe, quizás también algo más."
NOTA: 4/5
No os voy a engañar: la primera parte de Las chicas Sullivan, Mi plan D, me gustó mucho y me sentí algo decepcionada al ver que la pareja protagonista, Kenzi y James, en realidad no duraron mucho. En especial después de leer el final de ¡Eh, soy Les! que me dejó algo fría. Aun así, la autora ha creado otra novela fresca, divertida y llena de amor, con un toque algo más adulto que me ha gustado casi más que las anteriores, por lo que no me ha decepcionado del todo.
Kenzi es muy dulce y divertida. Por muchos años que hayan pasado desde el primer libro, sigue siendo la misma, algo más madura, pero sin perder su esencia. Es torpe, natural e ingeniosa, lista para una nueva aventura en Nueva York y para enfrentar su primer trabajo con todas las ganas del mundo. Pero, como ya sabréis si conocéis a Kenzi, si algo le puede salir mal, le saldrá fatal, por lo que, una vez más, las risas están aseguradas con esta novela.
James es justo como recordaba, aunque ese lado pícaro y bromista esta algo más suavizado por la responsabilidad de su trabajo. Pero es estar con Kenzi y volver a ser él mismo, volver a disfrutar de las pequeñas cosas. Su relación no acabo por falta de amor, y eso se nota desde el primer momento en el que se ven, aunque a ambos les cueste reconocerlo. Hay cierta evolución en ambos que ha sido muy bonito contemplar, ver como ambos sacan lo mejor del otro, como maduran un poquito más juntos y vuelven a disfrutar de la vida en lugar de seguir encerrados en sí mismos. He disfrutado mucho de su historia y de ese final perfecto que ambos se merecían y por fin han tenido. Ay, creo que es la novela que mas he disfrutado de la trilogía de Las chicas Sullivan.
Respecto a los personajes secundarios, especial mención a Mel y Jack, que son adorables, y a Mara y Seo, que son de lo más divertidas. Me hubiese gustado poder disfrutar algo mas de Les y saber cómo está su relación con Hunter, pero aún queda Eres real, no perdamos la esperanza.
La pluma de la autora me ha atrapado de nuevo. Tiene una forma de escribir tan cercana que te engancha y hace que sea una lectura ligera y amena. Es inevitable devorar el libro, ya sea por los personajes, la historia o la forma en la que está escrito. Y como he dicho antes, he disfrutado esta historia mucho. Porque no he podido evitar que me atrapara tanto la pluma de su autora como la historia, y es que Kenzi me fascinó desde el primer momento y James me ha conquistado sin remedio. Sin duda una novela juvenil romántica, refrescante y adictiva, fácil de leer y muy divertida. Os la recomiendo sin duda, en especial si disfrutasteis de las historias anteriores.
Y esto es todo por hoy, Viajeros. ¡Espero vuestra opinión sobre el libro y la reseña en los comentarios!
¡¡Muchos besos desde la Aurora!!
-A-
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